El más inteligente de la clase: Algo común en las victorias de Daniel Felipe Martínez en el Critérium du Dauphiné en 2020 y en #Itzulia es que fueron carreras con la última etapa loca, con lluvia de ataques, y DFM leyendo muy bien la carrera. Muy fuerte en la subida pero también el más INTELIGENTE de la clase, cubriendo los corredores fuertes, tirando cuando fue necesario alejar a sus rivales, y también sabiendo aprovechar el trabajo de otros favoritos con intereses alineados. En Itzulia, Daniel Felipe Martínez además demostró mejora en varios aspectos, como en la velocidad de punta, lo que le permitió ganar la etapa 4, adjudicándose bonificaciones necesarias en una carrera tan apretada. También mejoró en el descenso, aunque sigue siendo su talón de aquiles, para ganar Itzulia se requiere bajar cerca de los mejores, y mantenerse en el camino.
Itzulia fue un paso adelante para Remco Evenepoel, aunque se han leído críticas apuntando a que cuando llega la montaña Remco no aguanta con los mejores, en Itzulia, una de las rondas de una semana más montañosa del calendario, quedó solo a 21 segundos del líder, y solo fue superado por dos escaladores del más alto nivel como Martínez y Vlasov, y por un local que conoce el recorrido como la palma de su mano, Ion Izaguirre. Remco perdió solo 37 segundos con Daniel Felipe Martínez entre la contrarreloj inicial y la última etapa, 10 de los cuales fueron por bonificación del Colombiano en la etapa 4, lo que demuestra que esta vez Remco no se desfondó. Otro punto importante a favor del belga fue que se vio descendiendo bien, incluso en la persecución de la etapa final descontó en el descenso al grupo de favoritos en el que estaba Ion y Pello, quienes son kamikazes bajando.
Jonas Vingegaard es muy bueno, pero una cosa es ser líder bajo la sombra de otro, sin tener presión, y otra es tener la responsabilidad de ser capitán del equipo y obtener resultados, con los rivales cubriendo sus movimientos e incomodándolo. Sin embargo su experiencia en Tirreno Adriático como líder, y en Itzulia compartiendo capitanía con Roglic, será de gran importancia para que el Jumbo intente batir a Pogacar en el Tour. Por ahora para ser un vueltómano confiable como los eslovenos, Carapaz o Egan, necesita seguir adquiriendo experiencia.
La revancha del Ineos Grenadiers quienes se encargaron de controlar la carrera desde la etapa 2, hasta la etapa 6 con final en Arrate. Llevaron un equipazo, donde sobresalió el trabajo de Geraint Thomas, haciendo relevos larguísimos a un alto ritmo, durante 2, 3 o 4 premios de montaña seguidos, esto permitió cansar a sus rivales y dejar el trabajo listo para que Tao, o Carlos Rodríguez remataran el grupo, aislando a los líderes al fundir a sus gregarios. Muy buen trabajo de Omar Fraile, que aunque no salía mucho en la transmisión televisiva, llevaba el pelotón en las primeras rampas del día, y sobre todo, en gran parte de los descensos que conocía como la palma de su mano. El trabajo de Tao fue romper la carrera en la fase definitiva para aislar a los líderes, que aunque pareciera que fuera por poco tiempo, lo cumplió a la perfección. Por último la interacción entre Adam Yates y Daniel Felipe Martínez funcionó muy bien tanto en París Niza como en la Vuelta al País Vasco.
La Itzulia tiene un recorrido precioso que funciona muy bien en una vuelta de una semana, planteando una carrera durísima para los corredores y espectacular para los aficionados. Esto no significa que así debería ser el recorrido de una gran vuelta, donde es muy difícil que los organizadores planeen 4, 5 o 6 etapas de media montaña seguidas, se retirarían la mitad de los participantes, y la mayoría de los líderes no atacarían como en Itzulia porque podrían terminar exhaustos para la siguiente semana.
Enric Mas lleva dos caídas bajando en dos carreras seguidas, en etapas con un alto nivel de exigencia, en los momentos en que se define la carrera. Puede ser por cansancio como le pasó a Kruijswijk en el Giro del 2016, o falta de pericia, aunque no pareciera ser el caso, o simplemente mala suerte. Por otra parte Mas se vio algo agresivo en Itzulia, intentando atacar dos o tres veces, lo que había prometido a inicio de temporada.
Vlasov se consolida como líder indiscutible del Bora Hansgrohe de cara a las vueltas de 3 semanas, específicamente para el Tour de Francia; Ni Buchmann, ni Konrard, ni los nuevos Hindley o Higuita tienen el nivel o la consistencia del ruso. Vlasov ha dado un importante paso adelante en el Bora, siendo más consistente, y sobretodo moviéndose mucho mejor en carrera, y lo mejor es que mantiene su poder en la contrarreloj y la montaña. Un claro aspirante al podio del Tour de Francia.
Los eslovenos se pueden vencer, Roglic fue imponente en la contrarreloj inicial, sin embargo sufrió de molestias físicas, y debido a la dureza de la carrera no fue posible su recuperación. Una de las claves del Ineos Grenadiers fue hacer la carrera dura durante toda la semana, a tomar nota para el Tour de Francia.